La marimba,
el sonido que acompañó, acompaña y acompañará a los guatemaltecos
La cultura guatemalteca no sólo destaca por su impresionante biodiversidad y su rica historia, sino también por su profundo y variado legado artístico. Desde el canto tradicional hasta la fotografía contemporánea, el arte guatemalteco ha experimentado una notable evolución, reflejando tanto la herencia ancestral como la innovación moderna.
La marimba, el instrumento nacional de Guatemala, tiene una historia profunda y arraigada en la identidad cultural del país. De acuerdo con el libro Historia y evolución de la marimba en Guatemala, de Luis Fernando Díaz, el origen del instrumento es objeto de debate, pero se cree que proviene de África y fue traída a América durante el período colonial. En Guatemala, la marimba encontró un hogar y se adaptó a las influencias locales, convirtiéndose en símbolo musical de la nación.
ORIGEN Y EVOLUCIÓN
En su forma inicial, la marimba era similar al balafón africano, un instrumento con teclas de madera que se tocaba con mazos. Con el tiempo, los artesanos guatemaltecos modificaron el instrumento, agregando resonadores de calabaza y más tarde tubos de metal para amplificar el sonido. En el siglo XIX, este instrumento fue adaptado para tocarlo en conjunto, lo que dio origen a la marimba de tecomates y, posteriormente, a la marimba cromática, que permite interpretar melodías más complejas. Esta última versión fue patentada en 1894 por Sebastián Hurtado y Julián Paniagua, músicos guatemaltecos que contribuyeron a su evolución.
Este instrumento ha sido utilizado para celebrar importantes eventos en la vida social y política del país. Durante la era de la Independencia y más tarde, bajo el gobierno de Justo Rufino Barrios (1871-1885), la marimba se convirtió en el instrumento oficial de eventos cívicos. En la década de 1930, el presidente Jorge Ubico la declaró el instrumento nacional. Desde entonces, ha sido interpretada en festividades, ceremonias y en conmemoraciones patrias.
RECONOCIMIENTOS NACIONALES E INTERNACIONALES
En 2015, la UNESCO declaró la marimba como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, lo que reafirma su importancia global.
En Guatemala, en 1999 el Congreso de la República declaró el 20 de febrero como el “Día de la Marimba”, para celebrar su importancia cultural y su legado histórico. En esta fecha, se organizan eventos, conciertos y exposiciones para resaltar el valor de este instrumento.
NUEVAS PROPUESTAS Y FUSIÓN DE GÉNERO
La marimba ha comenzado a formar parte de fusiones con géneros como jazz, rock, música electrónica y pop. Esta nueva tendencia permite a los artistas guatemaltecos llevar la marimba a audiencias más amplias y heterogéneas, tanto dentro como fuera del país. Bandas y músicos independientes han jugado un papel fundamental en esta transición.
Por ejemplo, Gaby Moreno, reconocida cantante y compositora guatemalteca, ha incluido la marimba en algunas de sus producciones, mezclándola con jazz, soul y blues. Esta combinación ha permitido que la marimba llegue a escenarios internacionales, abriendo nuevos caminos para la música guatemalteca en el extranjero.
Otro ejemplo es el grupo Marimba Contemporánea, que mezcla sonidos electrónicos y experimentales con la marimba tradicional. Estos músicos han logrado llevar este instrumento a festivales internacionales de música electrónica y world music, fusionando ritmos modernos sin perder la esencia de la tradición.
El proyecto Marimbas de Luna ha sido otra de las iniciativas más destacadas en el contexto guatemalteco. Este colectivo busca modernizar la marimba a través de la creación de piezas que incluyen instrumentos tradicionales y modernos, además de incorporar sonidos electrónicos. Su música abarca desde la marimba tradicional hasta composiciones originales que exploran nuevas posibilidades sonoras.
